martes, 29 de noviembre de 2016

POESÍA



Tendré que levantarme dormido en tus brazos
y malgastar el recuerdo de tus besos en mi boca
para poder quebrar la oscuridad con la que ahogas
mis leves intentos de escapar de ti.
Burlar las calles por las que paseo mi vida, torciendo
renglones escritos con manos de arcilla.

De Abadón tus puños secos querrán golpear la puerta
por la que entrarás cual serpiente envenenada de ira,
pasión y desesperanza.
¿Qué sombra latente deslizará la calma convirtiéndola
en tormento?