viernes, 1 de junio de 2012

Son días tristes

El sol etiqueta las ventanas despegando los colores del pasado con la misma certeza que en otros veranos se dibuja sobre tu piel la sombra de tu fragilidad. Sentado en cualquier cafetería, recorres las lágrimas de frío que se deslizan por el cristal verde de tu cerveza, aspirando hasta el último intento el ansia de transformar tu sed en algo más productivo. Miras a tu alrededor. Ojeas el periódico y las noticias llenan de nubes grises la actualidad y el futuro de los actores secundarios de esta comedia. Fracasos exitosos y triunfos mediocres que llenan las portadas de incertidumbre, desasosiego y falsa esperanza.

Ni el sol, ni el verano, ni una cerveza fría. Son días tristes.